
Nunca una racha de resultados había definido tan bien la marcha de dos equipos en la última década en la NBA. Y es que los más de 5 años de derrotas de Sacramento frente a Miami reflejaban a las mil maravillas la situación de ambas franquicias, unos Heat que desde que llegó Wade y posteriormente King James estaban en la élite, y unos Kings que desde aquella final de Conferencia alcanzada en 2002 han pasado a ser uno de los peores equipos de la NBA. Ayer los Kings consiguieron derrotar a Miami, algo que no hacían desde el 2 de marzo de 2008, cuando ganaron 120-108. Una curiosidad que refleja bien la importancia de este dato es que por aquel entonces DeMarcus Cousins, estrella actual de los Kings tenía solo 17 años y jugaba en LeFlore High School. Por su parte Ben McLemore, novato este año de los Kings, estaba en noveno grado y solo tenía 15 años.
El 2 de marzo de 2008 los Kings vencieron por 120-108 a Miami Heat. Por aquel entonces en los Kings jugaban jugadores como Mike Bibby, Abdur-Rahim o Brad Miller, en sus últimos años de carrera, Kevin Martin y Ron Artest. En Miami por su parte estaban Dwayne Wade, Shaquille O'Neal o "Chocolate Blanco" Williams.
Esta racha de derrotas refleja a la perfección el status que ambos equipos han tenido en la liga en los ultimos años. Los Miami Heat, desde la llegada de Lebron James y Chris Bosh para formar, junto a Wade, el "Big Three", han pasado a ser el mejor equipo de la NBA y actuales bicampeones de la liga.
Por su parte los Kings viven años de penuria. Concretamente lo hacen desde que se terminó la etapa de inicios de este siglo, que tanto maravilló a lo aficionados. Aquel equipo estaba formado por un quinteto para el recuerdo. Mike Bibby de base, Doug Christie de escolta, Peja Stojakovic de alero, Chris Webber de cuatro y Vlade Divac de center.
Con un juego alegre y muy ofensivo, los Kings protagonizaron algunos grandes records en liga regular, aunque luego en los playoff no consiguieron nunca materializar esas sensaciones en un anillo. La vez que estuvieron más cerca de hacerlo fue en la temporada 2001-2002, cuando llegaron a la final de Conferencia. En aquella final cayeron por 4-3 frente a los Lakers, en un séptimo partido ya histórico. Esa derrota frente a Bryant y O'Neal marcó el inicio del fin de aquel maravilloso equipo, y el comienzo de años oscuros, que aún continuan, para los Kings.