Jabari Parker ha sido uno de los mejores jugadores de la NCAA. Con unos promedios de 19,1 puntos y 8,7 rebotes, ha sido el líder indiscutible de los Duke BlueDevils, aunque estos fracasaron en el March Madness al ser eliminados en primera ronda por Mercer. Aun así, su cartel no se ha visto mermado de cara al Draft 2014.
Formado en el Simeon High School, llegó a la NCAA esta temporada como uno de los mejores prospects. Y aunque a nivel colectivo el resultado de Duke no fue el esperado, a nivel individual cumplió con las expectativas que había puestas en él, que eran muy altas. En su única temporada en el baloncesto universitario ha demostrado que tiene todas las cualidades para llegar a ser toda una estrella en la NBA.
Es un jugador muy potente físicamente, lo que acompaña además con una altura de 2,07 metros, más que considerable para alguien que se va a desenvolver en el puesto de alero. Su capacidad atlética es importante, lo que le convierte en un gran finalizador cerca del aro y en un muy buen penetrador.
Su tiro también es bastante bueno, aunque evidentemente lo puede mejorar. En su único año en la NCAA ha presentado unos promedios de un 47,3% en tiros de dos, un 35,8% en triples y un 74,8% en tiros libres. Además, cuando se levanta en suspensión, uno de sus movimientos favoritos es el de dar un paso atrás, para alejarse así del defensor, en un gesto que recuerda mucho al de Paul Pierce.
También es un jugador que va muy bien al rebote, tanto al ofensivo como al defensivo, como demuestran las 8,7 capturas por noche que ha promediado en esta temporada. Con su altura, su potencia física y su salto, será un jugador que ayudará mucho en esta faceta.
Los que le conocen, dice de él que tiene una gran ética de trabajo, que siempre está dispuesto a aprender y que es capaz de asumir el liderato cuando su equipo lo requiere (ganó cuatro títulos estatales de Illinois en su época de instituto). Además, pese a no ser un pasador consumado, su buena lectura del juego le permite encontrar a los compañeros desmarcados cuando recibe un dos contra uno.
Evidentemente, Jabari Parker también tiene puntos débiles. Uno de los más importantes y claros está en la defensa. Sus movimientos para defender a jugadores de perímetro son algo lentos, mientras que para defender en la pintura le falta cuerpo. Además, es muy habitual verle perder la posición, lo que muchas veces se traduce en puntos fáciles de su par.
Otro de sus puntos flojos está a la hora de seleccionar los tiros. Al ser un jugador capaz de manejar bien la bola, es capaz de crearse sus propios lanzamientos, por lo que muchas veces toma decisiones equivocadas y fuerza demasiado los tiros, bajando así su porcentaje de acierto. Pero este punto es algo en lo que irá mejorando día a día, en cuanto adquiera algo de experiencia.
Sí todo va como se espera, Parker, hijo del ex NBA Sonny Parker (Golden State), será seleccionado entre los tres primeros. Y si tenemos en cuenta los problemas de espalda de Joel Embiid, posiblemente no baje del segundo puesto.