Marcus Smart, un físico descomunal

Marcus Smart parte con opciones de ser uno de los jugadores más interesantes de este Draft. El base de los Cowboys es uno de esos jugadores que harán de este Draft uno de los mejores de los últimos años, ya que sin ser una de las primeras opciones será un jugador muy válido a corto plazo en la NBA.

Las previsiones dan a Marcus Smart (Flower Mound, Texas, 6 de Marzo de 1994) rondando el puesto cinco del próximo Draft. La realidad es que Smart no aparece como uno de los jugadores que más ruido esté haciendo desde que terminó la temporada NCAA, pero varios equipos lo tienen en su punto de mira por su combinación de físico y calidad ofensiva, pese a que tiene muchos aspectos de su juego que mejorar.

Smart destaca por encima del resto de bases de este promoción por su enorme capacidad física. Las mediciones oficiales le dan una altura en torno al 1'90, pero al igual que otros jugadores llegados recientemente a la NBA (Bledsoe, Waiters) es muy potente, con un peso superior a los 100 kilos de puro músculo. No hay ningún jugador en este Draft con la potencia de Smart, que además lo completa con velocidad y una gran capacidad de salto.

Viendo estas capacidad físicas es fácil deducir que la principal arma de Smart a la hora de anotar es la penetración. Es rápido y fuerte y además ha desarrollado un gran control del cuerpo que le permite ir al choque y acabar las jugadas con canasta, lo cual acompaña con mucha facilidad para sacar faltas a los defensores (promedia casi 8 tiros libres por partido con porcentaje superiores al 70%). Smart supera a casi todos sus defensores en el uno contra uno, por lo que sabe explotar esa posibilidad.

El mayor de sus defectos es el lanzamiento. Pese a que mejorado algo lo ofrecido en su año de novato, aún es un deficiente lanzador exterior, muy supeditado a las rachas (como veremos en el siguiente vídeo), lo cual le aleja de ser un buen tirador. Tampoco explota demasiado el lanzamiento de media distancia, por lo que a la salida de los bloqueos es habitual verle penetrar y no intentar un lanzamiento exterior. Tampoco destaca por su selección de tiro, lo cual le hace presentar unos pocentajes muy bajos para lo que un jugador de sus características podría marcar (41%).

Pese a sus capacidades físicas, no hay duda de que Smart es un base. Es un jugador con un muy buen manejo del balón y muy inteligente en la lectura del juego. Pasa muy bien el balón cuando recibe doble marcaje y sabe leer bien los bloqueos y continuación, bien doblando al compañero o bien penetrando y sacando al tirador en el lado de la ayuda. Aunque sigue teniendo tendencia a la pérdida de balones, en unos sistemas donde no todo el peso ofensivo caiga sobre él podrá mejorar este registro.

Smart también es uno de los mejores defensores exteriores de este Draft. Tiene un movimiento lateral de piernas rápido y sale con velocidad de los bloqueos rivales, por lo que llega con facilidad a puntear los tiros de sus pares. Es uno de los mejores "ladrones" de la NCAA esta temporada, con tres robos de media por partido, en parte por su facilidad para no perder el contacto con el rival, su capacidad de recuperar la distancia ganada y una envergadura de más de 2'20. También por su capacidad física y su recuperación de posición es un base que ayuda en el rebote defensivo. Aunque en la NBA no presentará estadísticas similares (casi 6 por partido en NCAA), sí que ayudará mucho en el rebote y marcar el contraataque.

Por último, uno de los aspectos donde más expectación levanta Smart es en su visceralidad como jugador. Es un líder nato y un competidor feroz, lo cual le hace llegar muy enchufado a los finales apretados de partido. En ocasiones esto le cuesta una mala selección de tiro y algún que otro problema extradeportivo, como el sufrido esta temporada con un aficionado de Texas Tech que vemos en estas imágenes.

https://www.youtube.com/watch?v=qSBU1kK3dXg

En general, Smart se plantea como una de las grandes opciones por detrás de los tres grandes jugadores de este Draft (Wiggins, Embiid, Parker), aunque algo menos atractivo que otros como Vonleh o Exum. No es el mejor base puro del Draft, pero sí que tiene la combinación perfecta de físico y capacidad analítica de juego, además de rendir por encima de la media en el aspecto defensivo. Será uno de los jugadores con los que medir el verdadero alcance de este Draft.