Una gran selección brasileña acabó con el sueño de los argentinos que sólo aguantaron el ritmo durante 15 minutos. Los de Magnano ponen la directa hacia las medallas y se verán las caras con Serbia en cuartos de final.
Era un partido emocionante en cuanto a nombres e historia, se veían las caras dos campeonas del mundo y dos selecciones que siempre llevan al rivalidad a cualquier deporte. Los brasileños partían como favoritos y así lo demostraron con la holgada victoria (85-65) sobre una selección argentina cuya generación dorada (Scola, Nocioni, Prigioni...) se despide de este Campeonato del Mundo y posiblemente del panorama internacional.
Arrancó bien Argentina con un Prigioni enchufado que consiguió 15 de sus 18 puntos en la primera mitad del encuentro. Los brasileños parecía que iban a remolque hasta que empezó a brillar la figura de Raulzinho Neto, el MVP del partido gracias a sus 21 puntos y a algunas jugadas de calidad que dejaron con la boca abierta al público que, esta vez si, llenó el pabellón. Argentina no lograba encontrar a Scola (9 puntos y 7 rebotes) que venía de promediar 21.6 puntos por partido en la primera fase. Los brasileños pusieron la directa con Neto y Marquinhos (13 puntos y 8 rebotes) y la albiceleste no pudo aguantar el ritmo.
Al último cuarto se llegó con una ventaja de 8 puntos que los brasileños supieron gestionar e incluso aumentar en este último periodo aprovechándose de las carencias defensivas de Argentina que no supo parar la buena selección de tiro de los de Magnano. Brasil se verá las caras con Serbia por un puesto en las semifinales donde se enfrentarán al ganador del España - Francia.