LeBron James salió al paso de las últimas críticas e hizo lo que tenía que hacer, defender a su entrenador, David Blatt.
“Él es nuestro entrenador. Quiero decir, ¿qué otro entrenador tenemos?”, dijo James tras las informaciones que surgieron en Cleveland sobre la preocupación del equipo a cómo estaba respondiendo el entrenador novato David Blatt.
Estas declaraciones se interpretaron quizás como un encogimiento de hombros por parte de la estrella del equipo ante la presión que está recibiendo ahora su entrenador. Se esperaba que los Cavaliers no fueran el mejor equipo defendiendo en la liga, pero se compensaría en ataque. En cambio, ocupan el cuarto puesto en la lista de mejores ataques y el vigesimotercero en defensa.
Pero LeBron James tiene ya muchas tablas en la NBA, y sabe que cualquier palabra que salga de su boca puede crear revuelo, así que se puso el uniforme de buen soldado y ofreció su apoyo incondicional a David Blatt:
“Mi relación con el entrenador es mejor cada día. Sólo llevamos dos meses juntos. Yo no lo conozco completamente, ni él conocía a ninguno de estos chicos, era de esperar. Es nuestro primer año juntos, pero tiene toda nuestra atención.
Estoy feliz de que lo tengamos al timón. Es nuestro entrenador. Sólo dicen que hay peleas entre Blatt y yo, o entre el equipo y Blatt para vender. Para vender y para que la gente lo lea, eso es todo.”
Sin embargo, no será hasta que el equipo empiece a jugar mejor cuando se disipen las dudas sobre el futuro de Blatt en el banquillo. El propietario de los Cavs, Dan Gilbert, no ha tenido reparos en cambiar de entrenador en el pasado, e incluso si aún es demasiado pronto para dejar caer el hacha sobre la cabeza de David Blatt, las cosas deben empezar a encarrilarse desde ya.
Como siempre ha sido el caso para los equipos aspirantes, el objetivo de los Cavaliers es tener su pico de juego en abril, no a mediados de diciembre. El equipo no puede adaptarse tan rápido como hicieron los Heat en 2010, aunque ese grupo también tuvo problemas, pero aún hay tiempo suficiente. No hay motivo de preocupación para los fans de los Cavaliers, aún.