El mánager de un equipo de Euroliga pide la cancelación de la competición

La situación es de extrema gravedad y parece ser necesaria la toma de decisiones cuanto antes. Ya son varias las ligas nacionales que han decidido cancelar lo que restaba de competencia y nombrar ganadores. Si bien es cierto que las grandes ligas permanecen a la espera de cómo va la lucha contra el coronavirus, las previsiones no son halagüeñas y estar más de un mes sin competir supone una pérdida masiva de dinero para los clubes. Mantenimiento de contratos con jugadores, pérdida de dinero al no vender entradas y mermas en los contratos de patrocinio, suponen un lastre demasiado pesado para algunos equipos, que optan descaradamente por una cancelación de la Euroliga 2019/2020.

Por el momento, Jordi Bertomeu, presidente de la competición, no ha tomado ninguna decisión y todo indica que el objetivo es finalizar. Las consecuencias económicas de no poderse continuar con la Euroliga serían desorbitadas y el gigante del baloncesto FIBA busca evitarlo a toda costa. Sin embargo, ya hay equipos, como el Zalgiris, que saben que no competirán más en su liga nacional, mientras que todos los clubes están sin poder entrenar. Esta situación parece insostenible en el tiempo y planea la posibilidad de que los equipos busquen pronto renegociar contratos con jugadores o, incluso, aplicar ERTEs. Asvel Villerbeune y Olympiacos han dado permiso a sus jugadores extranjeros para que se marchen, en previsión de que sea complicado retomar la competición.

La esperanza está encarnada en la CBA China, que tres meses después del surgimiento del coronavirus parece poder recuperar la normalidad. Se entiende que una vez pase todo, se requerirá de un período de readaptación en el que los equipos puedan entrenar y recuperar efectivos, lo cual provoca que el calendario se vaya de las manos. Mucho más si se mantienen en pie los Juegos Olímpicos Tokio 2020, impidiendo que la Euroliga pudiera dilatarse en el tiempo. No ha trascendido el equipo cuyo mánager se hizo eco de esto en una misiva a la Euroliga, compartida por el diario griego SDNA, pero sus razonamientos son firmes.

"Es inviable continuar asumiendo pérdidas y mantener la vigencia de los contratos, sin ningún tipo de recorte. Debemos ser responsables y asumir sacrificios, necesitamos llegar a un acuerdo con Euroliga para ver qué podemos hacer". La previsión es que, como mínimo, no se retomará la competición hasta el 11 de abril, pero parece una previsión demasiado optimista. Si no se pudiera competir hasta mayo, todo quedaría en entredicho y la Final Four, programada para el fin de semana del 22 al 24 de mayo, sería inviable.