
Gran parte de la magia de la NBA es su carácter impredecible y cómo las cosas pueden cambiar en muy poco tiempo. A principios de temporada corrían ríos de tinta acerca del poderío histórico de los Nets con un Big 3 difícilmente repetible, pero a estas alturas del curso esa asociación se ha diluido por completo. Lo que nadie esperaba es que emergiera con fuerza inusitada un nuevo Big 3 en Philadelphia 76ers, con un James Harden que se está reencontrando con su mejor nivel, el carácter dominante de Joel Embiid y una estrella emergente como es Tyrese Maxey. El joven base hace olvidar a Simmons y relega a un segundo plano a Tobias Harris, poniendo de manifiesto el potencial de los Sixers en la lucha por el anillo.
Embiid/Harden/Maxey together
First game: 89 PTS, W
Second game: 87 PTS, W
Third game: 78 PTS, W
Fourth game: 80 PTS, W
Best trio in the league? pic.twitter.com/NVxmi9U8GQ
Desde que juegan juntos, han disputado cuatro partidos saldados con pleno de victorias y sumando muchos puntos entre ellos. Maxey imprime físicamente un ritmo muy alto, que permite a Harden encontrar huecos y fomentar su asociación con Embiid. Visto desde sus inicios como un base eléctrico y muy aprovechable, nadie esperaba la progresión meteórica en faceta ofensiva que está teniendo, promediando la friolera de 26,8 puntos por partido desde que llegó Harden al equipo. Con este panorama, resulta inevitable pensar que los Sixers sean claros favoritos al anillo ya que si Harris continúa subiendo su nivel, tendrían un equipo muy completo.
Tyrese Maxey since the Harden trade:
26.8 PPG
64.9 FG%
70.0 3P% on 5.0 attempts
We promise we didn’t make up those shooting percentages. pic.twitter.com/csinSHA9bA
¿Se imaginan lo que implica que un tercer espada de un equipo promedie el 70% de acierto en triples y casi el 65% en tiros de campo? Eso es lo que está haciendo un Tyrese Maxey que está absolutamente desatado y ha encontrado un nivel de confianza tal que le permite elevar a un estatus superior el rendimiento de Philadelphia 76ers. Será muy interesante comprobar si puede sostener este nivel en el tiempo, sobre todo, de cara a los playoffs donde las defensas suben su intensidad y la experiencia e intangibles entran en juego. Mientras tanto, Harden y Embiid aprovechan su eclosión para consolidar su idilio profesional y buscar la gloria.