
Discreto y trabajador. Santi Aldama se ha caracterizado siempre por estas dos características y con ellas ha llegado a la élite del baloncesto, pero en este Mundial 2023 asumirá un enorme protagonismo con España, que podría cambiar su carrera deportiva.
Un jugador de equipo excelente, un hombre generoso en el esfuerzo que desempeña su rol a la perfección en Memphis Grizzlies y que ha logrado consolidarse en la rotación. Pero, ¿y si Santi Aldama pudiera aspirar a mucho más? A sus 22 años, el margen de crecimiento de este jugador sigue siendo enorme y no hay mejor lugar para demostrar que puede alcanzar un nivel superior, que una Copa del Mundo FIBA 2023 en la que parta como una de las primeras opciones ofensivas en una selección como la española.
Si algo caracteriza a la NBA es encasillar demasiado pronto a los jugadores, percibirlos especialistas en algo y mermar su capacidad de salir de la zona de confort y explorar sus límites. Con Sergio Scariolo el bueno de Santi tiene más libertad de la habitual en su franquicia y no tendrá límites para poner de manifiesto su enorme talento, pero también su capacidad de liderazgo. Hacer un buen campeonato podría tener efectos inmediatos en su carrera, ganándose más minutos en los Grizzlies y teniendo claro que su siguiente contrato será más lucrativo. Por si esto fuera poco, ganarse un hombre como héroe nacional en España puede ser algo muy relevante para él.