Durante la celebración esta pasada madrugada del Indiana Pacers - Milwaukee Bucks, se vivió una curiosa jugada con Jared Dudley como protagonista.
Cuando el alero de los Bucks se disponía a lanzar desde el perímetro, el balón se le escapó incomprensiblemente de las manos como si hubiera sido taponado por un jugador imaginario. La dirección y velocidad que coge la pelota es realmente extraño.