La FIBA ha hecho oficial el nuevo sistema de competición que entrará en vigor a partir de 2017 en una rueda de prensa celebrada en Francia ante los medios de comunicación allí presentes aprovechando la presencia de los mismos con motivo de la celebración del EuroBasket 2015.
La organización, de la mano del Director Ejecutivo en Europa, Kamil Novak, el Director de Competiciones Deportivas, Predrag Bogosavljev y el Director de Comunicaciones, Patrick Koller, explicó un proyecto que incluye muchas ventajas en torno a la fase de clasificación para cada una de las competiciones a nivel de selecciones promovidas por la FIBA. El proyecto dará su pistoletazo de salida en el mes de noviembre de 2017 en Europa con la celebración de las eliminatorias de clasificación para el MundoBasket 2019 que tendrá lugar en China.
NOVEDADES
- Desplazamiento del próximo Mundial a 2019 para evitar coincidencias con otros grandes eventos deportivos. Celebración cada cuatro años.
- Periodo de clasificación para cada Mundial cada dos años, repartidos en seis 'pequeños eventos' (noviembre, febrero, junio, septiembre, noviembre y febrero).
- 32 selecciones por Mundial: organizador, doce de Europa, siete de América, siete de Asía/Oceanía y cinco de África.
- Selecciones divididas en dos grupos. División A (32 de Europa, 16 de África, 16 de América y 16 de Asia/Oceanía) y División B (equipos restantes).
- Clasificación para los Juegos Olímpicos a través de los resultados obtenidos en el MundoBasket y eliminatorias en preolímpicos.
- Asia y Oceanía unificarán su fase de clasificación en una única región global para asegurar una mayor competitividad.
- Todos los grandes torneos continentales (EuroBasket, AfroBasket, FIBA Américas,...) se celebrarán cada cuatro años.
- Todo ello tomará como punto de partida el Mundial de 2019.
VENTAJAS
- Mayor repercusión deportiva: más de 140 países participante y una cifra superior a los 1.250 jugadores.
- Mayor interés entre los aficionados: partidos oficiales como local.
- Sistema más amigable con los jugadores. Este método permitirá un mayor descanso a las grandes estrellas internacionales, quienes podrán afrontar los principales torneos con menor sobrecarga de trabajo.
- Nuevas oportunidades. Los países con menor tradición y posibilidades podrán disfrutar de las principales figuras del panorama baloncestístico.
- Mejor reparto de los partidos. Los aficionados podrán disfrutar de partidos oficiales de su selección durante todo el año, no solo en verano.
- Mayor difusión por parte de los medios de comunicación.
- Se otorgará nuevas herramientas y mayor recursos a las federaciones de cada país.