Quizá suene duro o pueda parecer injusta esta afirmación para con un jugador afincado al triple-doble y consumada estrella de la liga, como es Russell Westbrook, pero no hay más que remitirse a las pruebas. El base hace tiempo que dejó de ser un jugador con el que se pudiera aspirar a metas colectivas para convertirse en un obseso de las estadísticas individuales, un hombre enamorado de sí mismo y que quiere incluir su nombre en la historia de la NBA empleando el atajo de sus condiciones físicas y técnicas, pero dejando en un segundo plano el bien común. Bradley Beal no acaba de entenderse con él y Washington Wizards ha ofrecido sus mejores momentos de baloncesto en los partidos en los que no jugó.
Ahora ha llegado una lesión en el cuádriceps que mantendrá a Westbrook fuera de las canchas durante algo más de una semana, tal y como indica ESPN. Lejos de notar su ausencia, los capitalinos brillaron en su duelo ante Phoenix Suns, donde Bradley Beal mostró una vez más su enorme compromiso con el equipo y la ciudad, poniéndose el mono de trabajo y no brillando solo en aspectos numéricos, sino también en defensa. El escolta anotó 34 puntos y encontró aliados notables en Raulzinho Neto, un base sólido que redujo pérdidas y escogió bien qué hacer en cada momento, así como con el tirador David Bertans. Además, la lesión de Thomas Bryant para el resto de la temporada parece que puede dar alas a Robin López como titular.
Russell Westbrook puede convertirse en un problema para Washington Wizards
Lo que queda claro es que Russell Westbrook ha pasado, en apenas un mes de competición, de ser una ilusión a convertirse en un problema para Washington Wizards. Su participación en cancha equivale a derrota segura y problemas de química en el equipo, incapaz de surtir de balones a más jugadores que no sean él mismo y Beal, en un sobreesfuerzo forzado por mantener contento al segundo espada del equipo que hace merecimientos sobrados para ser el líder por encima de Westbrook. Habrá que ver cómo se desarolla esta semana porque Scott Brooks podría tener que tomar decisiones drásticas e inesperadas con Russ si el equipo sigue funcionando bien sin él.