Había dudas de que Milwaukee Bucks pudiera remontar el vuelo después de las dos últimas temporadas, muy decepcionantes para sus intereses, pero este inicio de campaña es peor de lo previsible. Giannis Antetokounmpo se afana en mantener a flote un equipo desnortado, sin identidad y carente de recursos. Si no cambia mucho todo, puede haber un traspaso.
Una estrella del nivel de Giannis Antetokounmpo no puede permitirse estar tres años en la NBA sin opciones competitivas reales. Cambios de entrenador, traspasos erróneos, fichajes que no rinden, agotamiento del proyecto y falta de recursos desde el banquillo sazonan los ingredientes de una receta letal para los intereses del griego y su equipo. Han ganado un partido de los cinco disputados y empiezan ya a circular rumores NBA de demolición del proyecto, con un traspaso del griego.
No sería de extrañar que fuera el propio Giannis Antetokounmpo quien terminara rindiéndose y decidiera solicitar su salida de la franquicia con la que alcanzó la gloria. En tal caso, ya hay un destino probable para él: Brooklyn Nets. Los neoyorquinos llevan tiempo monitorizando la situación del griego y tienen margen salarial suficiente como para apostar por su fichaje, acelerando de manera tremenda su proceso de reconstrucción y dando un protagonismo absoluto a Anteto.