La nueva estrategia de la NBA para reducir aún más el tanking

La NBA ha vuelto a poner sobre la mesa uno de sus debates más incómodos: cómo impedir que los equipos pierdan de forma deliberada para mejorar su posición en el Draft. En un contexto de mayor vigilancia tras el reciente escándalo de apuestas, la liga está analizando distintas reformas estructurales que podrían alterar de forma significativa el funcionamiento del sistema actual.

Una de las propuestas que más fuerza ha ganado internamente es modificar las protecciones de las selecciones traspasadas. En lugar de las habituales protecciones de “mitad de lotería”, la NBA contempla limitar estas cláusulas a rangos más extremos, como el top-4 o incluso el top-14. La liga considera que las protecciones intermedias incentivan a algunos equipos a perder partidos estratégicamente para no ceder su pick.

Otra medida que se ha discutido es impedir que una franquicia elija entre las cuatro primeras posiciones del draft en temporadas consecutivas. El objetivo sería cortar el tanking prolongado, obligando a los equipos a competir al año siguiente tras haber recibido un talento de élite, en lugar de acumular derrotas durante varios cursos.

También se ha valorado congelar las posiciones de la lotería a partir del 1 de marzo, lo que evitaría que las franquicias manipulen el tramo final de la temporada sentando a jugadores clave o reduciendo artificialmente su competitividad cuando la clasificación ya está encaminada.

Más pasos de la NBA hacia la competición total

Estas ideas se suman a una serie de acciones recientes de la liga. La NBA actualizó la semana pasada sus normas sobre los informes de lesiones y continúa trabajando con las casas de apuestas para determinar qué tipos de apuestas secundarias son aceptables, en un intento por reforzar la integridad competitiva del producto.

En los últimos años, la liga ya ha dado pasos para combatir el tanking, multando a equipos por descansos injustificados de estrellas y acordando con el sindicato de jugadores (NBPA) límites mínimos de partidos disputados para optar a premios individuales. También se han endurecido las normas sobre cuándo se puede dar descanso a jugadores sanos.

Cualquier cambio en el sistema del draft requerirá la aprobación de la Junta de Gobernadores de la NBA, un proceso complejo que implica el consenso de las franquicias. La última gran reforma se produjo en 2019, cuando la liga igualó las probabilidades de los tres peores equipos y amplió la lotería a la cuarta selección.

Ahora, con la credibilidad del juego bajo el foco y el tanking cada vez más sofisticado, la NBA se plantea si ha llegado el momento de una reforma más agresiva para proteger la competitividad de la liga durante toda la temporada.