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— SB Nation GIF (@SBNationGIF) 10 de mayo de 2016
Stephen Curry regresó a las canchas de la NBA tras cuatro partidos de ausencia pocas horas después de filtrarse su nombramiento como MVP de la temporada por segundo año consecutivo. Y lo celebró como mejor sabe: con un nuevo recital ofensivo.
Después de un inicio errático, el base se fue entonando poco a poco hasta terminar de explotar en una prórroga en la que se fue hasta los 17 puntos, más que toda la plantilla de los Blazers (14), para dar la victoria a su equipo e instaurar un nuevo récord histórico de anotación en un tiempo extra.
Gracias a la efectividad de su principal estrella, los Warriors dominaron con facilidad a su rival durante la prórroga hasta el punto de colocar un cómodo 128-120 en el marcador con un minuto por disputar. Una nueva demostración del mejor jugador de baloncesto de la actualidad que dejó completamente boquiabierto y sin palabras al propietario de los Blazers, Paul Allen.
El mandamás de la franquicia de Oregon es, además, el co-fundador de Microsoft. A lo largo de su dilatada y exitosa carrera empresarial es más que probable que haya vivido una cantidad incontable de situaciones de todo tipo pero, posiblemente, ninguna a la altura del recital de Stephen Curry.