Los secundarios de los Warriors ganan el primer partido de Las Finales

Ni Stephen Curry, ni LeBron James, ni Klay Thompson, ni Kyrie Irving. Ninguna de las grandes estrellas presentes en la cancha fue el protagonista en el Oracle Center. Anoche, los más importantes fueron los actores secundarios de los Golden State Warriors. Shaun Livingston, Leandrinho Barbosa y Andre Iguodala fueron los principales culpables de la victoria por 104-89 de los de Oakland ante Cleveland Cavaliers en el primer partido de las Finales de la NBA 2016.

El partido arrancó con los Warriors marcando el ritmo y con un Stephen Curry entonado que enchufó sus dos primeros triples. Pero esos minutos no fueron más que un espejismo, ya que a partir de ahí el MVP se atascó en la férrea defensa de Iman Shumpert y de LeBron James, y fue incapaz de hacer el juego y anotar los tiros imposibles a los que nos tiene acostumbrados.

Pese al desacierto de Curry y de Thompson, los Warriors fueron llevando la iniciativa en el marcador casi siempre, e incluso en el segundo cuarto superaron la barrera de los diez puntos de ventaja, gracias en gran parte a unos minutos mágicos de Leandrinho Barbosa, que firmó dos penetraciones imposibles y un triple desde la esquina. Al descanso, se llegó con un marcador de 52-43 favorable a los locales. Y eso que los "Splash Brothers" sólo habían firmado 10 puntos entre ambos, la peor anotación de esta pareja en un primer tiempo en toda la temporada.

Tras el descanso, los Cleveland Cavaliers se encomendaron a LeBron James y a Kyrie Irving para reducir la ventaja. Y desde luego que lo lograron, ya que incluso llegaron a colocarse por delante en el marcador durante un par de minutos. Klay Thompson y Stephen Curry seguían desaparecidos y la cosa parecía girar a favor de los de Ohio. Pero un parcial de 7-0 en los dos últimos minutos, culminado con un triple de Iguodala, devolvió el mando a los Warriors de cara al último y definitivo cuarto (74-68).

Y en los primeros minutos del último cuarto llegó el momento clave. Con LeBron James en el banquillo para coger oxígeno, surgió la enorme figura de Shaun Livingston, que acabó el encuentro con 20 puntos. El base suplente de los Warriors lideró con ocho puntos un parcial favorable de 22-8 en apenas seis minutos, que dejó el marcador en un casi definitivo 96-76. Con esa diferencia en el marcador volvieron a la cancha Curry y Thompson y los Warriors se relajaron, momento que aprovecharon los de Tyron Lue para ponerse a sólo once puntos (96-85), con casi cuatro minutos por disputar. Los nervios parecían invadir al Oracle Arena, pero ahí aparecieron por fin los "Splash Brothers" para poner la firma definitiva al primer triunfo de los Warriors en estas finales de la NBA con un triple de cada uno.

El próximo duelo de estas apasionantes finales será este domingo a las 02:00 hora española.