
Cuando utilizas demasiadas piezas defectuosas para construir algo, es muy probable que algo termine fallando o algún error termine desencadenando que todo se vaya al traste desde el principio. Un riesgo como el de este ejemplo es el que ha asumido Phil Jackson al fichar a Derrick Rose, Joakim Noah y Brandon Jennings, quienes tienen el denominador común de haber superado largas lesiones en los últimos años que bien podrían haber minado para siempre sus capacidades físicas, además del riesgo permanente de una recaída.
Derrick Rose solo ha conseguido jugar el 40% de los partidos de los Bulls de las últimas cinco temporadas. Joakim Noah apenas intervino -como suplente- en 29 partidos de la última temporada antes de lesionarse de gravedad el hombro derecho. Y Brandon Jennings se ha recuperado recientemente de una rotura del tendón de Aquiles.
Sin embargo, Phil Jackson asume todo este riesgo. El presidente de operaciones de los Knicks cree que dada la situación del equipo, vale la pena jugársela, tal y como ha confirmado él mismo a la ESPN.
"Después de dos malas temporadas necesitamos empezar a ganar"
Los New York Knicks solo han ganado 49 partidos en las últimas dos temporadas, y quieren volver a Playoffs en una Conferencia Este donde los equipos se han reforzado muy bien este verano.
Esta semana el entrenador del equipo, Jeff Hornacek, confirmó a la prensa que no tenía planeado utilizar a Rose y Jennings juntos durante demasiados minutos, aunque el propio Phil Jackson afirmó que la intención al contratarle era convertirle en el sexto hombre de la rotación.