
Lograr un triple-doble es algo difícil de hacer, y hacerlo ante los Boston Celtics lo es aun más, ya que los de Massachusetts llevaban sin encajar un triple-doble de alguno de sus rivales en los últimos 230 partidos. Hasta que anoche se cruzaron contra un Russell Westbrook que puso fin a esa racha y lideró a los Oklahoma City Thunder a la victoria por 117-112.
La actuación del base fue una auténtica exhibición (el pan de cada día en esta temporada por otra parte), al firmar nada más y nada menos que una tarjeta de 45 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias. Números que para cualquier otro jugador sería una excepción, pero que para Russell Westbrook está empezando a convertirse en lo normal en esta temporada 2016-17.
Pero el lograr su triple-doble número 14 de la temporada y 51 de su carrera poniendo fin a esa racha de los Boston Celtics no fue lo único destacable que hizo anoche Russell Westbrook. El base de los Oklahoma City Thunder también fue capaz de superar la barrera de los 40 puntos por tercer partido consecutivo.
Pese a lo complicado de hacer que es esto, hay que destacar que es la segunda vez en su carrera que Westbrook logra una racha de tres partido anotando 40 o más puntos. El base se fue hasta los 46 puntos en la derrota frente a Atlanta Hawks, a los 42 en la victoria frente a New Orleans Pelicans y a los 45 anoche, y tendrá la oportunidad de seguir con esta racha el Día de Navidad frente a Minnesota Timberwolves.
Lo cierto es que actuaciones como ésta no hacen más que reforzar la candidatura de Russell Westbrook para ser el MVP de la NBA esta temporada, a día de hoy la más fuerte de toda la liga. Y es que el de los Oklahoma City Thunder está promediando 31,8 puntos, 10,8 asistencias y 10,5 rebotes, claves para que su equipo lleve un balance de 18-12 y estén en puestos de playoffs.