Las claves del desplome de Doncic y los Mavs ante los Celtics

Durante unos minutos en el último cuarto del tercer partido de las Finales de la NBA el miércoles por la noche, los Boston Celtics parecían que sus malos hábitos iban a volver a perseguirles. Los Dallas Mavericks, que parecían muertos y enterrados cuando perdían por 21 puntos a falta de 10 minutos, remontaron con una racha de 22-2, poniendo en peligro la ventaja de Boston y amenazando con convertir el partido en una serie. Pero justo cuando las cosas parecían más sombrías, los Celtics dieron la vuelta al guión, limitando a Dallas a un solo tiro de campo en un periodo de cinco minutos, y se llevaron una victoria por 106-99 que les da una ventaja de 3-0 en la serie.

Boston Celtics está a una victoria de su 18º campeonato de la NBA, un récord que los Celtics pueden conseguir el viernes en el cuarto partido aquí en el American Airlines Center. "La experiencia es la mejor maestra", dijo Jaylen Brown, que terminó con 30 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias en 41 minutos.

"Todo el año hemos estado escuchando acerca de que los Celtics son el pasado. Durante los últimos seis a ocho meses, eso es todo lo que hemos estado escuchando: todas las diferentes deficiencias que hemos tenido en el pasado. Este es un equipo nuevo, ya me entiendes. Hemos aprendido de esas experiencias. Y en estos momentos se ve que hemos aprendido de ellas. Dimos la cara y encontramos la manera de ganar".

Parecía que Boston había encontrado el camino mucho antes, tras responder a una racha de 25-12 de los Mavericks en los primeros siete minutos, una racha en la que Kyrie Irving, que terminó con 35 puntos tras combinar 28 en los dos partidos en Boston, se puso en marcha por primera vez en la serie.

El parcial de 79-45 de los Celtics en los siguientes 29 minutos les permitió tomar una ventaja de 91-70 a falta de 11:07 para el final. En ese momento, Dallas parecía enfrentarse a otra derrota, a pesar de que Kristaps Porzingis, de Boston, no jugó el tercer partido y de que su situación era dudosa a causa de una inusual lesión en el tendón de la pierna izquierda que sufrió en el segundo partido.

Pero tan rápido como Boston había establecido el control, Dallas se redescubrió a sí mismo. Mientras Boston se ponía 1 de 11 y cometía tres pérdidas de balón en los siguientes 7:57, Dallas se acercó a 93-92 con una bandeja de Irving a falta de 3:37 a pesar de jugar sin Luka Doncic, que había cometido una falta unos segundos antes. Sin embargo, las cosas comenzaron a cambiar de nuevo en la dirección de Boston, como un putback de Brown de un fallo de Jayson Tatum fue seguido por un Derrick White de 3 puntos y un mate de Tatum, empujando la ventaja de los Celtics de nuevo a seis puntos. "Sí, creo que tuvimos algunas pérdidas de balón, lo que les permitió salir en transición", dijo White. "Y sólo un par de cosas que hemos estado haciendo muy bien, nos soltamos de la cuerda durante los minutos que fueron. Parecían, qué, dos minutos, lo redujeron a dos, tres o algo así. Ocurrió rápido, y volvimos a tranquilizarnos. Entendemos que es un juego de rachas, y simplemente confiamos en lo que hacemos".

En el pasado, podría haber sido un momento en el que los Celtics soltaran la cuerda y dejaran que Dallas cerrara el partido. Pero Boston perseveró y mejoró a 7-0 en la carretera en estos playoffs. En las tres últimas postemporadas, su balance como visitante es de 21-7, el mejor porcentaje de victorias en un periodo de tres años en la historia de la NBA, empatado con el de los Chicago Bulls de 1991 a 1993. Y los Celtics lo lograron gracias a las aportaciones de todos sus jugadores.

El pívot reserva Xavier Tillman entró en la rotación y jugó 11 minutos impactantes, encestando un tiro de 3, cogiendo 4 rebotes y poniendo 2 tapones, incluyendo uno a Doncic. Sam Hauser encestó 3 de 4 desde la línea de 3 puntos y sumó 16 puntos desde el banquillo después de haber encestado 0 de 5 desde la línea de 3 en el segundo partido.

Y Tatum, después de ir 6 de 22 en el Juego 2, terminó con 31 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias mientras él y Brown se combinaron para 61 puntos. Los Celtics están a una victoria de adelantar a Los Ángeles Lakers en el palmarés histórico de la liga. Pero después de que los Celtics perdieran 3-0 en las finales de la Conferencia Este el año pasado y forzaran un séptimo partido contra los Miami Heat, Boston sabe que el trabajo no está hecho.

"Sinceramente, no es demasiado difícil desde el punto de vista del año pasado [cuando] perdíamos 0-3 en las finales de conferencia, y realmente sentíamos que íbamos a remontar", dijo Tatum. "Casi lo conseguimos. Estuvimos a un esguince de tobillo de tener una oportunidad real. Así que, ya sabes, no nos estamos relajando ni nada por el estilo. Ya sabes, ni siquiera nos centramos en ganar o el viernes o lo que sea. Tardemos lo que tardemos, ése es nuestro lema. El tiempo que haga falta, eso es lo que va a hacer falta, y nadie intenta relajarse en absoluto".