Si algo ha quedado claro en el entorno de Miami Heat es que aún no ha superado su ruptura con LeBron James. Un idilio que terminó este verano cuando 'King James' decidió volver a casa.
Pat Riley, presidente de los Heat, ya habló sobre la decisión de LeBron de abandonar un "equipo generacional". Ahora es el turno del vicepresidente, Alonzo Mourning, de continuar con las declaraciones de estupefacción por la marcha del alero.
"Teníamos un gran equipo durante cuatro años consecutivos, y la razón por la que tuvimos ese equipo es porque no sólo conseguimos al mejor jugador del planeta sino al mejor equipo que se ha hecho.
¿Cómo vas a detener esa dinastía? Si has llegado a las Finales de la NBA cuatro años seguidos, ¿por qué no volver cuatro veces más? ¿Y otras cuatro? ¿Por qué no volver diez años seguidos? Es factible. Y Pat Riley no iba a dejar de traer piezas para complementar el equipo. Entonces, ¿por qué irse de una dinastía?".
Una pregunta que Mourning tendría que hacerle al propio LeBron, tal y cómo le recordó su entrevistador. "Sí. Es la pregunta. ¿Por qué irte de una dinastía para construir un equipo y empezar desde cero? Tienes a Kevin Love, que no es feliz en absoluto. Se va a ir de allí. Probablemente a los Lakers".
Para James no es de extrañar por qué dejó Miami. Si bien es cierto que los Heat fueron un enorme éxito en su carrera, se estaban empezando a mostrar las grietas entre su núcleo de jugadores, principalmente con Chris Bosh. Además de un cuestionable estado de salud de Dwyane Wade.
El argumento a favor de renovar con los Heat se vió afectado además por la falta de activos. Miami tuvo poco espacio en el tope salarial más allá de lo destinado a sus superestrellas y no contaba con ningún joven talento o rondas del Draft para mover.