Regresemos atrás en el tiempo hasta el Draft de 2011. Aquella misma noche, Sacramento, Charlotte y Milwaukee fueron los protagonistas de un traspaso a tres bandas que concluyó con Jimmer Fredette, décima selección global de los Bucks en Sacramento a cambio de Stephen Jackson y Shaun Livingston, ambos procedentes de los Hornets, quienes recibieron a Bismack Biyombo, séptima selección del Draft, y Corey Maggete.
Un movimiento que, a todas luces, abrió las puertas de Oakland a Klay Thompson. Los análisis previos de la gran mayoría de Mock Draft de la liga situaban al joven producto de Washington State en Milwaukee. El traspaso a tres bandas cerró la vía en favor de Fredette y los Warriors, con su undécima selección, pudieron reclutar a un escolta que, junto a Stephen Curry, conforman la mejor pareja exterior de la NBA y han devuelto un campeonato a la franquicia 40 años después.
Por ello, es normal que Klay Thompson haya declarado en una reciente entrevista a CBS Sports que "da las gracias a Dios cada día por no haber sido elegido por los Bucks."
Por su parte, los Bucks 'dejaron escapar' al que, cuatro años después, se ha convertido en uno de los mejores escoltas de la liga, aunque teniendo en cuenta el joven y prometedor proyecto liderado desde los banquillos por Jason Kidd, las cosas tampoco han ido nada mal en Milwaukee.