Stephen Curry acepta el reto de las 33 victorias consecutivas de Los Ángeles Lakers

Los Golden State Warriors han comenzado la temporada a un ritmo imparable y tras un mes de competición continúan como invictos después de sumar 17 victorias consecutivas y firmar el mejor arranque de la historia de la NBA.

Un excelso rendimiento que no ha hecho más que ratificar el campeonato conquistado por la franquicia de Oakland y, en lo individual, el premio al MVP de la temporada de un superlativo Stephen Curry. Sin embargo, la plantilla, la cual apenas ha podido digerir el histórico logro, ya ha puesto su mirada en el próximo reto: las 33 victorias consecutivas que firmaron en la temporada 1971-72 Los Ángeles Lakers de Wilt Chamberlain, Jerry West y Elgin Baylor.

De momento, los Warriors suman un total de 21 triunfos seguidos tras el cosechado esta madrugada ante Phoenix, lo que supone la cuarta mejor racha de la historia tras las 33 de los propios Lakers, los 27 de Miami Heat en la campaña 2013-14 y a tan solo una de igualar las 22 victorias registrados por Houston en la temporada 2007-08.

Sobre la consecución de este nuevo hito ha hablado en la gran referente de la plantilla, Stephen Curry, quien ha reconocido que lucharán por seguir haciendo historia pero que, por otro lado, no será ningún decepción si caen derrotados en los próximos partidos.

"Claro que hablamos de las 33 victorias. Creo que probablemente he hablado de ello más que nadie en el equipo. Pero sabemos que es algo realmente difícil. Hemos tenido dos rachas de 16 victorias consecutivas en los últimos dos años, ambas han sido hazañas muy especiales. Para superar el récord tenemos que reunir esas dos rachas en una. Vamos a jugar duro para acercanos a ese registro pero tampoco será una decepción si no lo conseguimos. Hay muchos equipos con talento en esta liga y lo que realmente nos preocupa es mantener este gran nivel. Si conseguimos llegar a las 29 o 30 victorias, será momento de hablar más en serio."

Esta próxima madrugada, los Warriors tendrán la oportunidad de acercarse un poco más al histórico registro de Los Ángeles Lakers en la visita al Oracle Arena de los Sacramento Kings.