
DeMarcus Cousins se ha comprometido a llevar a los Sacramento Kings a sus primeros Playoffs en los últimos diez años la próxima temporada. Por eso aunque la temporada terminó para él hace ya dos meses, el integrante del segundo mejor quinteto del curso en la NBA sigue entrenando para mejorar en el apartado físico y ya ha perdido 20 libras, que vienen a ser poco más de 9 kilos.
La estrella de los Kings se prepara para los Juegos Olímpicos de este verano en Rio de Janeiro, en los que el Team USA no podrá contar con una larga lista de jugadores que han anunciado su renuncia a participar, por lo que será una oportunidad de oro para reivindicarse en el equipo nacional y aprender de la influencia de Gregg Popovich, algo que podría serle muy útil durante el resto de su carrera. Las ausencias confirmadas de LaMarcus Aldridge, Blake Griffin y Anthony Davis anticipan que Cousins tendrá un rol muy importante en la cita olímpica.
En declaraciones al Sacramento Bee, el pívot de 25 años afirma que está en el peso más bajo de toda su carrera desde que llegase a la NBA. "Me vendrá bien para adaptarme al nuevo ritmo de juego". También destaca que pesar menos le ayudará a prevenir lesiones en sus pies como las que ha sufrido en los últimos años.
Cousins está convencido de que la próxima temporada será en la que los Kings regresen a la élite de la liga, algo que de momento les ha costado 10 años y 9 entrenadores diferentes sin éxito.