
Tras una temporada para olvidar en cuanto a resultados, los Dallas Mavericks afrontarán la agencia libre de este verano con muchas ambiciones, y si quieren volver a ser competitivos saben que sus necesidades empiezan por el base titular del equipo.
Después de cortar a Deron Williams, quien tenía muchas papeletas para cambiar de aires en verano, los Mavs parecen haberse fijado en Jrue Holiday, quien afronta este verano la agencia libre sin restricciones por primera vez en su carrera en la NBA. El hasta el 1 de julio base de los New Orleans Pelicans está en una buena posición para obtener un gran contrato este verano, y parece que en Dallas están dispuestos a darle lo que pida, según ha desvelado Ian Begley, de la ESPN.
El base de 27 años firmó en 2013 una renovación de 4 años y 41 millones de dólares, lo que se ha quedado corto teniendo en cuenta su rendimiento -cuando ha estado sano- de 15,4 puntos, 7,3 asistencias y 1,5 robos de balón por partido. El ex de los Sixers puede optar a un contrato que podría llegar a los 100 millones de dólares.
Lo que tendrán que valorar en Dallas son si desconfían de sus antecedentes con las lesiones. Un jugador que tenía potencial para ser All-Star -y lo fue en 2013- se ha ido viendo limitado por distintas dolencias que han ido erosionando su potencial. Sin embargo este año se ha mantenido sano y su rendimiento ha sido regularmente alto, por lo que supondría un buen complemento para los Mavericks, aunque hay que preguntarse si merece la pena pujar a la alza por él.