Los Cavs ganan más cuando Calderón juega más

El banquillo resultó clave en la última victoria de los Cleveland Cavaliers, ante Pistons, para romper una mini-racha de dos derrotas consecutivas ante Denver y Philadelphia. Tras tres choques sin disputar ni un solo minuto, José Manuel Calderón volvió a disfrutar del parqué y jugó algo más de quince minutos en el triunfo de los suyos en Detroit. En ese tiempo anotó un triple, robó un balón y repartió una asistencia.

El papel que le está tocando jugar a Calderón en estas dos últimas temporadas es diferente. De ser un base titular o que jugaba los mismos minutos que el titular, ha pasado a tener un papel residual, pero a la vez importante, en la dinámica de los equipos en los que está. Lo buena de esta temporada es que ese papel lo está haciendo en un equipo ganador como los Cavs, al lado de LeBron James, y no en unos Lakers perdedores o en unos Hawks sin muchas opciones de nada como durante el curso pasado.

Es complicado tener que salir a la cancha después de varios partidos completos en el banco, sin embargo, Calderón, a sus 37 años, está más que preparado para ello, como así demuestran sus números. Le vino muy bien al equipo cuando Isaiah Thomas y Derrick Rose estaban lesionados, le vino muy bien durante el traspaso y en los últimos choques en los que ha jugado ha dejado claro que está listo para jugar cuando le reclamen.

Fun is back! (-- Winslow Townson-USA TODAY Sports) pic.twitter.com/odTZ4ldRxP

— José Calderón Fans (@Calderon8_Fans) 11 février 2018

De hecho, los números de Cleveland con Calderón jugando más de quince minutos son muy buenos: 18 victorias y 7 derrotas. Son cifras muy superiores que contrastan con los partidos en los que tiene una participación residual: 5 triunfos y 12 derrotas.

Las estadísticas sin él en el como también son positivas para los Cavaliers: 14 victorias y 5 derrotas. Es algo que no es de extrañar, Calderón está jugando en los malos momentos, cuando el equipo necesita soluciones diferentes desde el banco o cuando falta algún jugador por lesión.

Más allá de los números, el base extremeño se ha ganado el respeto de LeBron James y de su entrenador Tyronn Lue. Quizás no juegue mucho en los próximos choques, quizás, pero cuando lo necesiten, estará tan preparado como el que más.