La importancia del entorno es fundamental en algunos jugadores de baloncesto y la selección española tiene a tres capaces de crecerse mucho cuando se enfundan la camiseta nacional. Usman Garuba y los hermanos Hernangómez no llegan en su mejor momento a estos Juegos Olímpicos París 2024, pero aspiran a resurgir con fuerzas renovadas.
Su caché ha bajado de forma ostensible y su futuro está en el aire. Unos tuvieron que abandonar ya la NBA y el otro parece a punto de hacerlo. Sin embargo, perciben estos Juegos Olímpicos París 2024 como la oportunidad perfecta para demostrar al mundo que siguen pudiendo ser auténticas estrellas de este deporte. Si algo tienen en común es que se crecen cuando representan a España y no hay mejor escenario posible que una cita olímpica para reengancharse a su mejor versión.
Tienen por delante tres partidos ante rivales de primera entidad. En el caso de Usman Garuba, se prevé que esté en el ojo de huracán ya que será el encargado de defender a jugadores como Antetokounmpo y podría ser determinante a la hora de intentar frenar la circulación de balón de Canadá y Australia. Respecto a los hermanos Hernangómez, deben dar un paso adelante en cuanto a liderazgo ofensivo del equipo y poner de manifiesto su enorme talento ofensivo. Si lo consiguen, sus carreras deportivas pueden experimentar un nuevo repunte.