Atlanta se convierte en la criptonita de los Cavaliers de LeBron James

Los Atlanta Hawks se han vuelto a interponer en el camino de los Cavaliers por tercera vez consecutiva en lo que llevamos de temporada. La franquicia de Ohio aterrizaba esta pasada madrugada en el Philips Arena de Atlanta con la intención de dar un golpe sobre la mesa de la Conferencia Este y sumar una más a su racha positiva de cuatro victorias consecutivas. Sin embargo, los Hawks se encontraban en una dinámica similar con cinco triunfos sucesivos, en el que fue un duelo entre los dos equipos con mejor racha del Este.

Como ocurriera en las dos anteriores ocasiones que ambos conjuntos se enfrentaron (17 y 30 de diciembre), los pupilos de Mike Budenholzer salieron victoriosos de un duelo del que los Hawks han salido especialmente reforzado ante uno de los equipos llamados a luchar por el campeonato, unos Cavs que presentan un balance negativo (1-3) ante el equipo con mejor marca de la liga (49-12).

Atlanta volvió a apelar a su gran rendimiento colectivo para no dar opción a unos Cavaliers que salieron dormidos a la cancha y que se vieron, a las primeras de cambio, con una desventaja de 17 puntos tras el primer parcial, una distancia que los Hawks supieron administrar a la perfección a pesar de las acometidas de LeBron James, Kyrie Irving, Kevin Love y compañía. El propio LeBron fue la víctima de la férrea defensa de un DeMarre Carroll que secó a la estrella de Ohio, quien se quedó en 18 puntos (con un 5 de 13 en tiros de campo), anotando solo 5 de ellos con Carroll en pista, y sufrió 9 pérdidas de balón.

El propio Carroll concluyó el encuentro con 11 puntos y 7 rebotes, en un partido donde destacaron las actuaciones de Al Horford (19 puntos, 9 rebotes y 6 asistencias), Paul Millsap (16 puntos y 8 rebotes) y Dennis Schröder (15 puntos y 8 asistencias), líder desde la segunda unidad. Por parte de Cleveland, Kyrie Irving fue el máximo anotador del encuentro al sumar 20 puntos y añadir 4 asistencias, mientras que Kevin Love logró 14 puntos y 8 rebotes.

Esta derrota impide ascender a los Cavaliers hasta la segunda plaza de la Conferencia Este por lo que se tendrán que conformar, al menos de momento, con la cuarta posición.