Carmelo Anthony ha ratificado sus deseos de seguir en los Knicks, a pesar de las tempestades que puedan seguir llegando a la franquicia neoyorquina. Así lo ha hecho saber a los periodistas después del entrenamiento de este lunes en la rueda de prensa que concedió el jugador de 31 años. Melo fue preguntado por si llegado el caso, se plantearía solicitar el traspaso a las oficinas de los Knicks, a lo que su respuesta fue "¡Diablos, no!".
En cualquier caso, los jugadores de la NBA tienen prohibido hacer pública esta información, si es que el jugador no hubiera sido del todo sincero, para salvaguardar la imagen del equipo y que el traspaso es lo más justo posible.
Carmelo fue traspasado a los New York Knicks en la temporada 2010-11 procedente de los Denver Nuggets, y el pasado verano de 2014 firmó una extensión de 124 millones de dólares y cinco años, después de negociar con Chicago Bulls y Houston Rockets mientras era agente libre.