Durante el encuentro de pretemporada que Oklahoma City Thunder y Dallas Mavericks disputaron la pasada madrugada, el novato de los Dallas Mavericks, Justin Anderson, osó atreverse a machacar el aro ante Serge Ibaka, quien está considerado como uno de los mejores defensores interiores y uno de los jugadores más intimidantes de toda la NBA.
El partido terminó con victoria de Oklahoma por 88-100. Russell Westbrook lideró a los suyos con 19 puntos, mientras Enes Kanter lograría un doble-doble (17 puntos y 11 rebotes). En los Mavs destacó la figura del ex de Atlanta Hawks, John Jenkins, con 26 puntos.
Seguro que el ala-pívot congoleño nacionalizado español de los Thunder le apuntó la matricula a la joven promesa de los Mavs.