
Los ejecutivos de la NBA están viendo desde la distancia la situación por la que está atravesando Oklahoma City Thunder y que desde dentro envíen un mensaje al público: "No estamos buscando intercambiar a Chris Paul", para mostrar, aunque sea de forma ficticia, que no existe presión en conseguir un traspaso por el base de Carolina del Sur, según ha informado Brian Windhorst, periodista de ESPN. El contrato del veterano jugador ex de Houston Rockets, es una gran lacra que puede impedir una reconstrucción.
A Paul le quedan tres años de contrato, un montante monstruoso, que se desglosa de la siguiente manera: más de 38 millones y medio esta temporada, algo más de 41 millones en la campaña 2020-21, y también tiene una opción de jugador por valor de 44 millones para la 2021-22. Paul y los Thunder probablemente busquen una alternativa antes de que suceda todo esto ya que, CP3 no va a estar dispuesto a perder una gran cantidad de dinero en su úlimo año y la franquicia tampoco está dispuesto a dárselo a un jugador que ya viene cuesta abajo y sin frenos.
"Esto es lo que los ejecutivos esperan que suceda, esperan que los Thunder envien un mensaje como este: No estamos buscando un traspaso para Chris Paul, le queremos aquí", un pequeño intento de mostrar que no están tan desesperados como puede parecer, algo que, evidentemente, es así.
La pasada temporada con los Rockets, consiguió promediar 15,6 puntos, 4,6 rebotes y 8,2 asistencias por partido en 58 encuentros. Ha sido nueve veces 'All-Star' y tuvo unos promedios de 41,9% de tiros de campo, un 35,8% de tiros de tres y un 86,2% desde la línea de tiros libres. A pesar de los rumores que lo situaban en Miami Heat, la franquicia de Florida no está dispuesta a comprometer su proyecto. Todo apunta a que se quedará toda la temporada en Oklahoma, a no ser que el base titular de una franquicia estrella caiga lesionado.