Los Wolves podrían traspasar a Ricky Rubio antes de la fecha límite

Ricky Rubio se encuentra en el primer año de su nuevo contrato de cuatro temporadas y 55 millones de dólares firmado este verano, en un acuerdo que no ha asegurado, ni mucho menos, su continuidad en Minneápolis.

Según un informe procedente del New York Daily News, los Wolves podrían traspasar al base español en los próximos días coincidiendo con la fecha límite para traspasos. Los primeros rumores sugieren que los Knicks estarían muy interesados en hacerse con sus servicios.

La irrupción de Zach LaVine, quien recientemente conquistó su segunda corona en el Slam Dunk Contest, y el estancamiento de Ricky ha convencido a la directiva de Minnesota para poner al internacional español en el mercado a la espera de una oferta interesante.

Aún así, la operación, como en la gran parte de las mismas, conlleva sus riesgos. Pese al gran potencial residente en LaVine y sus notables aptitudes ofensivas, el perfil del sophomore dista mucho de ser el de un director de juego. De hecho, los Wolves pecaron de excesiva desorganización y falta de ideas cuando Ricky estuvo lesionado el pasado curso.

Aunque su carente efectividad y regularidad en el lanzamiento sigue siendo su gran handicap y quebradero de cabeza tras cinco temporadas en la liga, pocos bases en la NBA presentan la calidad y el desparpajo de un Ricky que, además, suele copar los primeros puestos de la competición en asistencias y robos.

Además, si le respetan las lesiones, su salario se convertirá en una auténtica ganga con la llegada del nuevo contrato televisivo que comenzará a entrar en vigor a partir de la temporada 2016-17.

De confirmarse finalmente la operación, en los despachos de los Wolves ratificarían su apuesta incondicional por los dos principales pilares de futuro del equipo: Andrew Wiggins y Karl-Anthony Towns.