A pocos días del inicio de la temporada, el entrenador de Los Angeles Lakers, JJ Redick, habló sobre la necesidad de instaurar hábitos defensivos propios de un equipo campeón. Durante años, el lema ha sido claro: “la defensa gana campeonatos”. Sin embargo, la pasada temporada los Lakers tuvieron la decimoséptima mejor defensa de la liga.
Hubo, eso sí, un tramo de casi un mes en el que fueron el mejor equipo defensivo de la NBA, lo que demuestra que son más que capaces de defender a gran nivel. La cuestión es cómo volver a alcanzar ese punto.
Durante la offseason, los Lakers incorporaron a varios jugadores con buenas cualidades defensivas individuales. Pero la gran incógnita es si la defensa colectiva podrá alcanzar un nivel digno de aspirar al título.
El análisis pasa por observar quiénes podrían ser los mejores defensores del plantel, sus fortalezas y sus debilidades.
Jarred Vanderbilt: intensidad y versatilidad
Jarred Vanderbilt es probablemente uno de los mejores defensores del equipo. Su desafío, no obstante, sigue siendo la producción ofensiva.
Se trata de un defensor perimetral capaz de marcar a jugadores desde la posición dos hasta la cuatro. Posee la longitud, rapidez y recursos para cambiar asignaciones sobre los bases y romper el flujo ofensivo rival.
Vanderbilt no debería enfrentarse a jugadores más grandes, como hizo durante la temporada 2024–25. Su mejor versión aparece cuando defiende a aleros anotadores sin un manejo de balón especialmente sólido, como Devin Booker, Franz Wagner o Kevin Durant.
Durante la campaña 2022–23 mostró su punto más alto, pero tras la cirugía de pie perdió algo de velocidad. Redick deberá encontrar la mejor manera de utilizarlo, especialmente teniendo en cuenta que Vanderbilt defiende mejor a escoltas que Jake LaRavia, de quien se hablará más adelante.
Jake LaRavia: energía y tiro exterior
Jake LaRavia ha sufrido diversas lesiones en sus tres primeras temporadas en la NBA. Si logra mantenerse sano, tiene el potencial de ser una versión más joven de Dorian Finney-Smith.
El curso pasado, Finney-Smith fue asignado a la defensa de aleros, una tarea para la que LaRavia tiene las herramientas necesarias. A diferencia de Vanderbilt, LaRavia puede aportar tiro exterior, con un 37,2% de acierto en triples en su carrera.
Será interesante observar cómo Redick combina a LaRavia y Vanderbilt. Si lo desea, puede utilizar a ambos simultáneamente para interrumpir el ataque rival, aunque el reto estará en mantener el equilibrio ofensivo junto a Luka Doncic y LeBron James.
Una de las virtudes de LaRavia es el esfuerzo constante. Aunque aún no está al nivel defensivo de Finney-Smith, posee el tamaño necesario para enfrentarse a aleros y escoltas grandes, además de una actitud incansable.
Deandre Ayton: rebotes y disciplina
Cuando se habla de un pívot protector del aro, el nombre de Deandre Ayton no suele ser el primero que aparece. No es el mejor defensor interior, pero aporta aspectos positivos.
Ayton no comete faltas innecesarias: en cinco partidos de pretemporada sumó solo nueve faltas en total, menos de dos por encuentro. Aunque algunos rivales logren superarlo, rara vez incurre en faltas tontas.
Su papel en los Lakers será capturar rebotes y bloquear tiros. No se espera que defienda los pick and roll a gran nivel, pero puede rondar los dobles dígitos en rebotes. En la pretemporada promedió nueve rebotes y casi dos tapones, cifras que, si mejoran ligeramente, podrían ser muy valiosas para el equipo angelino.

Marcus Smart: experiencia y físico
Luka Doncic personalmente pidió la incorporación de Marcus Smart a los Lakers. Sin embargo, el ex Jugador Defensivo del Año ya no se encuentra en su mejor versión, como en sus días con los Boston Celtics.
En las dos últimas temporadas, las lesiones le limitaron a 54 partidos en total, y es evidente que ha perdido algo de velocidad.
Aun así, Smart sigue siendo un guardia fuerte y experimentado que los Lakers pueden usar estratégicamente. Ya no puede defender con la misma eficacia a figuras como Ja Morant, Stephen Curry o Shai Gilgeous-Alexander, y al intentar recuperar terreno suele acumular más faltas al buscar cargas ofensivas.
No obstante, conserva la inteligencia y la dureza física que lo caracterizan, cualidades que pueden seguir marcando diferencias en momentos puntuales.
LeBron James: defensa selectiva y liderazgo
Pese a su edad y los problemas físicos, LeBron James sigue siendo posiblemente uno de los mejores defensores del equipo. Con la llegada de Ayton, los Lakers podrían dosificar su energía ofensiva y pedirle un esfuerzo mayor en defensa.
En tramos cortos de dos o tres minutos, pocos jugadores en la NBA pueden ofrecer una defensa tan intensa como la suya. El inconveniente es el desgaste energético, que podría afectar su rendimiento ofensivo.
Redick deberá encontrar el equilibrio adecuado y, sobre todo, ver cuánto acepta James de este nuevo rol. Los aficionados recordarán a Grant Hill, quien fue reconocido como gran defensor en sus últimos años, llegando a terminar 7.º y 14.º en las votaciones al Jugador Defensivo del Año con 38 y 39 años. Si los Lakers utilizan a LeBron en un papel similar, es muy probable que responda con eficacia.