
Kevin Durant terminó el duelo entre Brooklyn Nets y Toronto Raptors siendo mucho más importante de lo que podría preverse a tenor de su carta de tiro, aparentemente incompatible con las estadísticas con las que terminó. Y es que terminar con 17 puntos, 10 rebotes, 4 asistencias, 2 robos y 2 tapones, lanzando tan solo en 7 ocasiones a canasta, resulta algo de otro planeta. Fue determinante en el triunfo de su equipo, que toma distancia en el liderato de la Conferencia Este.