LeBron James confiesa algunos secretos de su juventud

El de Akron está muy activo en las últimas semanas, y no sólo hablando de baloncesto, sino de temas que afectan a la sociedad americana y mundial

Juan López | 30 Ago 2018 | 20:39
facebook twitter whatsapp Comentarios
LeBron James, junto a sus invitados en 'The Shop'. Foto: HBO
LeBron James, junto a sus invitados en 'The Shop'. Foto: HBO

HBO estrena hoy 'The Shop', un documental en el que LeBron James habla con estrellas del deporte y el espectáculo en una barbería. La estrella de Los Angeles Lakers está encantado con este show, en le que solo hay una regla: "está prohibido mentir".

El primer tema controvertido que LeBron James trata en el programa tiene que ver con la división racial que a día de hoy sigue viviendo gran parte de Estados Unidos y que él mismo vivió en su adolescencia:

"Fui a un instituto con gente blanca. La primera vez que fui, en noveno grado, pensé: 'Joder, no voy a hacer nada con estos blancos'. Crecí en el barrio y tenía metido en mi cabeza que ellos no tienen relaciones sexuales con nosotros. No quieren que nosotros tengamos éxito. Ellos estaban arriba y nosotros abajo, casi por debajo de esta silla".


En declaraciones traducidas por los compañeros del diario Marca, LeBron continúa con su reflexión adolescente: "Yo iba al instituto a jugar al baloncesto y eso era todo. No quería tener nada que ver con los blancos. No creía que ellos quisieran, así que mis colegas y yo íbamos al instituto a jugar. Esos fueron mis primeros pensamientos con respecto a la América blanca. Tenía 14 años y era la primera vez en mi vida que pensaba eso. Fue algo un poco loco. Tuve que adaptarme a ello. Es difícil de asumir. Yo era un chico que jugaba a su deporte a cierto nivel y en mi mente pensaba: '¿Están ellos felices de que yo esté aquí por quién soy o por la conversación que pueden tener conmigo?".

En el extracto, LeBron confiesa que se ve como un modelo para muchos jóvenes: "Crecí con raperos como Jay-Z, Snoop Dog, 2Pac o Biggie y ahora yo tengo la oportunidad de servir de inspiración a todos estos chicos que están mirando. Para mí sentarme y no decir una mierda, cuando hay mucha gente que no dice nada, no me sentiría bien. Al final, cuando decidí que iba a empezar a hablar y que no me importaba una mierda si me afectaba, todo mi pensamiento era que todo eso no iba sólo sobre mí".