Una de las causas de que Anthony Davis no acabara en Los Angeles Lakers en el último mercado de traspasos estuvo en el hecho de que Boston Celtics habló con New Orleans Pelicans para prometerle en verano una gran oferta. Ésta podría incluir a Terry Rozier, Jaylen Brown y, sobre todo Jayson Tatum, la joya de la corona.
Al contrario de lo que en su momento dijo Lonzo Ball (que aseguró que no quería irse a New Orleans ni en pintura), Tatum tiene claro que marchándose de los Celtics va a poder liderar una franquicia. Se sabe con calidad para ello y por eso no oculta que no le importaría marcharse de Massachusetts:
"Jugaré baloncesto donde sea. Jugaré donde me quieran. Ese es mi trabajo. Sé que no puedo controlar algunas cosas, así que no tiene sentido perder el sueño. Los comentarios sobre mi futuro no me afectan. Jugaré donde sea".