En su inicio de temporada 2025/26, la NBA no ha podido disfrutar bien de los primeros encuentros de Regular Season. La competición vio cómo el FBI detuvo a Terry Rozier III y Chauncey Billups por apuestas deportivas ilegales. Y Adam Silver, comisionado de la liga, se ha pronunciado por primera vez al respecto.
El comisionado de la NBA rompió finalmente el silencio y ofreció declaraciones públicas en medio del escándalo. Sus palabras llegan después de que el jugador de Miami Heat y el entrenador de Portland Trail Blazers,fueran acusados por investigadores federales de presunta implicación en apuestas deportivas ilegales.
En una entrevista concedida a Cassidy Hubbarth para Prime, Silver reconoció haber recibido la noticia con sorpresa y preocupación: “Mi reacción inicial fue una profunda conmoción. No hay nada más importante para la liga y sus aficionados que la integridad de la competición. Sentí un nudo en el estómago. Fue muy molesto”.
El comisionado explicó además cómo se manejó internamente el caso de Rozier, quien en su momento continuó jugando pese a las sospechas iniciales. Según Silver, las irregularidades se detectaron gracias a los sistemas de monitoreo de casas de apuestas legales:
“Fue un comportamiento aberrante en torno a un partido en marzo de 2023. Los reguladores y las casas de apuestas nos informaron, y procedimos a investigar de forma transparente. Aunque se registraron apuestas inusuales, no hallamos pruebas concluyentes”.

Silver detalla la investigación
Silver añadió que el jugador cooperó desde el primer momento: entregó su teléfono a la oficina de la liga y participó en entrevistas. Finalmente, la investigación interna no encontró evidencias suficientes para sancionarlo. Sin embargo, la reciente acusación federal ha reabierto el caso y ha colocado nuevamente a Rozier bajo el escrutinio público.
El comisionado fue claro al subrayar los límites de actuación de la NBA frente a las autoridades judiciales: “El gobierno federal tiene poder de citación, puede amenazar con encarcelar a la gente. La liga no cuenta con esos recursoss. Hemos estado colaborando con ellos desde el principio. Y lo que se anunció ayer fue una acusación formal. Dos años y medio después, Terry no ha sido condenado por nada, pero entendemos que la situación no pinta bien”.
Rozier se encuentra actualmente en licencia administrativa, mientras la investigación continúa su curso. Silver defendió la decisión, insistiendo en que la liga busca un equilibrio entre el respeto al debido proceso y la protección de la integridad de la competición.
Antes de concluir, Silver se dirigió directamente a los aficionados, consciente del impacto mediático que este caso ha tenido justo en el arranque de la nueva temporada: “Pido disculpas a nuestros aficionados porque todos estamos lidiando con esta situación. A pesar de todo, la competencia en la cancha ha sido espectacular. Pero nada está por encima de la integridad del juego”.