¿Negocio o baloncesto? Guerra de poder en el seno de los Clippers

La franquicia angelina podría estar viviendo un episodio de luchas internas entre Doc Rivers, Steve Ballmer y Gillian Zucker.

Roberto Carlos Mateos | 07 Sep 2015 | 13:37
facebook twitter whatsapp Comentarios
BlogdeBasket, baloncesto en estado puro
BlogdeBasket, baloncesto en estado puro

A pesar del cambio total de imagen y el lavado de cara que han experimentado Los Angeles Clippers este último verano, a pesar del cambio de propietario que sufrió la franquicia en la primavera de 2014, a pesar de la mejoría en los resultados del equipo, que por primera vez en décadas tiene muchas más opciones que sus vecinos los Lakers de aspirar al anillo... la vida no termina de ser tan feliz en el Staples Center como a muchos les gustaría...

Y es que según ha publicado este lunes TMZ Sports en su página web los Clippers estarían librando una lucha de poder interna que involucra directamente a tres de los nombres más poderosos de la organización; el propietario Steve Ballmer, el entrenador jefe Doc Rivers y la presidenta de operaciones de negocio, Gillian Zucker.

Cuando Ballmer se hizo con las riendas del equipo angelino, apostó por Zucker para renovar y modernizar la imagen corporativa de un equipo que a pesar de estar posicionado en uno de los mejores mercados geográficos de los Estados Unidos que siempre había vivido a la sombra de sus vecinos, los Lakers. Gillian venía de la NASCAR y tal y como recoge TMZ, algunos jugadores de forma anónima se han quejado de que no entiende -ni se esfuerza por entender- la cultura NBA. La misma fuente relata como desde hace unos meses, esta directiva podría haber estado ganando terreno a Rivers en el campo estrictamente baloncestístico, algo que no es bueno para una organización que al fin y al cabo necesita resultados para impulsar su nueva imagen. Todo esto estaría ocurriendo con el beneplácito del propietario, Steve Ballmer.

El testimonio de varios jugadores de la plantilla, que han permanecido en el anonimato, da a entender que la lucha de poder es evidente. "Si tienes dos jefes y cada uno de dice que tienes que hacer una cosa distinta ¿a quién haces caso" se preguntaba uno de ellos.


TMZ contactó con la presidenta de operaciones de negocio de los Clippers, que se mostró muy sorprendida con esta versión. "Tenemos muy clara la diferencia entre negocio y baloncesto" dando a entender que no se había entrometido en las decisiones del entrenador Doc Rivers. Sin embargo, el columnista Bill Simmons podría no ir del todo desencaminado al afirmar que en la nueva era Ballmer los Clippers estaban siendo igual o más disfuncionales que en la gris y ya pasada época de Donald Sterling.

El vicepresidente de comunicaciones de los Clippers, Seth Burton, quiso quitar hierro al asunto y sin desmentir un conflicto interno de poder en la organización, habló de que la organización todavía está amoldándose a su nuevo propietario. "Cuando un equipo cambia de dueño, ambas partes necesita n varios años para aclimatarse la una a la otra. Hay cosas nuevas, cosas que cambian y otras que siguen igual. En cuánto a lo que los jugadores piensan de este tema, no sabría que decirles"