Pocas horas separan al Real Madrid de su tercera final de Copa del Rey consecutiva, la sexta en los último siete años. En un partido que puede, a su vez, marcar un hito histórico en la competición, ya que ningún equipo en la historia ha conseguido ganar tres veces seguidas el torneo en su actual formato.
Enfrente, el conjunto blanco tendrá a un Herbalife Gran Canaria que, en clara contraposición, afrontará su primera final copera después de exhibir una espectacular evolución en los últimos años que ya se saldó con la final de Eurocup en 2015. El equipo insular viene de deshacerse, con remontadas épicas en ambas eliminatorias a Valencia Basket y Dominion Bilbao Basket, gracias a una conjunción perfecta entre ataque y defensa, algo que ha querido destacar Pablo Laso.
"En la final me preocupan muchas cosas", reconoció el entrenador blanco. "Me preocupa el estado de forma de sus jugadores, como Oliver, la capacidad de Pangos en el desborde, la rotación exterior, buenos jugadores sin balón, la apertura de Aguilar y Báez en el juego de fuera a dentro y Omic y Savané dentro son muy sólidos. Tienen una rotación muy amplia, creo que su esfuerzo defensivo, su agresividad les marca lo que quieren en el partido y a nosotros nos obliga a hacer un muy buen trabajo ofensivo y defensivo".
Además de a todos los componentes de la plantilla del Gran Canaria, Laso quiso elogiar a su entrenador, la imponente y jerárquica figura de Aíto García Reneses, uno de los mejores entrenadores que ha dado el baloncesto español.
"El gran mérito de Aito no es llegar a finales, es que todavía entrene, que sea un referente como entrenador en los muchísimos años que lleva de baloncesto. A mí no me gusta medir a los entrenadores por llegar a finales, creo que los entrenadores demuestran con sus trayectorias, independientemente de jugar finales, de ganarlas, y creo que Aíto se merece el respeto de todo el mundo del baloncesto. No me merece más respeto por jugar hoy una final, no necesita jugar una final para Aito demostrar lo que es como entrenador."
Incluso se atrevió a bromear cuando empezaron a salir las comparaciones entre ambos.
"A Aíto, para empezar, todavía le queda más pelo que a mí… Yo disfruto de mi trabajo, como todo en la vida, lo más importante y lo más difícil es poder disfrutar de mi trabajo. El día que pierdes ese hambre, ese día está muerto. Yo lo viví como jugador. Como entrenador, el gran mérito de Aito es eso. A mí personalmente, no lo sé. Ojalá yo tenga esa capacidad que ha demostrado él."
Finalmente, Laso reconoció sentirse orgulloso por el trabajo del equipo durante todo el torneo y sorprendió al afirmar que no siempre se valora a los equipos que firman la difícil gesta de alcanzar una final de Copa.
"Obviamente, yo estoy muy contento de llegar a una final. Como digo siempre, el estar aquí, se habla solo del partido de hoy, pero hay una trayectoria detrás para todos los equipos que han llegado a esta fase final, hay un esfuerzo en un fin de semana súper intenso. Muchas veces no se valora a la gente que llega a finales y hoy tenemos a un debutante en una final que está aquí por méritos propios. Yo me siento muy orgulloso de la trayectoria del equipo, muy orgulloso de mis jugadores, pero ya está, esto no me va a dar nada en el partido de esta tarde".