La primera de pocas noticias de este tipo en el proceso pre-draft sucedió hoy, ya que al contrario de muchos Udoka Azubuike decidió no presentarse al draft y continuar al menos un año más jugando para los Kansas JayHawks.
Su entrenador, Bill Self, declaró que “estamos muy contentos sobre la decisión de Udoka de no entrar al draft” y no estaba mintiendo, ya que Azubuike se convirtió en un jugador muy importante en su sistema. Cierto es que el pívot solo pudo jugar nueve encuentros en la temporada por una lesión en su mano, pero en esos juegos promedió 13,4 puntos, 6,8 rebotes y 1,6 tapas en 20 minutos.
Azubuike tuvo algunos encuentros con equipos NBA, ya que en un principio se había declarado elegible para el draft aunque no había contratado un agente, pero parece que sus actuaciones no lo convencieron y que volver a Kansas para su año sénior era su mejor opción.
Cuando termine su cuarto año en la universidad, Azubuike será elegible automáticamente para el draft. SI tiene suerte, su camino en la mejor liga del mundo comenzará en un año.