"¿Ya no hay que coger al avión a Milwaukee?: Damian Lillard, exultante en su vuelta a los Blazers

El ya exjugador de los Bucks pasó por un infierno personal en Wisconsin y está encantado con su vuelta a Portland

Juan López | 22 Jul 2025 | 10:27
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Damian Lillard, estrella de Portland Trail Blazers.
Damian Lillard, estrella de Portland Trail Blazers.

Damian Lillard está de vuelta donde todo comenzó. El base firmó un contrato de tres años y 42 millones de dólares con los Portland Trail Blazers, equipo con el que jugó sus primeras 11 temporadas en la NBA. El acuerdo incluye una cláusula de no traspaso y la opción de salir tras dos campañas.

Lillard, de 35 años, compartió el momento con sus tres hijos: Damian Jr., de 7 años, y los mellizos Kalii y Kali, de 4. Durante el trayecto de regreso a casa tras firmar, sintió el peso emocional del regreso.

"Solo pensar que estaré de nuevo en casa en todos los aspectos de mi vida —con mis hijos, jugando para los Blazers, conduciendo por las mismas calles que he recorrido durante toda mi vida adulta, con mi familia aquí, mi madre, mis hermanos, mis amigos por toda la ciudad—, todo eso cuenta", dijo. "No esperaba que ocurriera tan pronto".

Aunque no volverá a la cancha de inmediato —una rotura del tendón de Aquiles en abril lo dejará fuera toda la temporada 2025-26—, Lillard no descarta reaparecer si está en condiciones. "Mi yo más orgulloso pensaría diferente, pero con la edad viene la sabiduría", explicó. "Si lo mejor es tomarme todo el tiempo necesario para estar bien, eso es lo que haré".

Chauncey Billups, entrenador de Portland, bromeó: "Le dije que este año será el asistente mejor pagado de la historia de la liga, porque lo pondré a trabajar cada día".

El gerente general Joe Cronin confirmó que no apresurarán su regreso: “Esperaremos todo lo que sea necesario”.

Lillard, que promedia 25,1 puntos y 6,7 asistencias por partido en su carrera, sigue siendo una figura muy querida en Portland. “Cuando me detuve en un semáforo, me giré y vi a mi hija mirándome. Le dije que estábamos de vuelta en casa. Y me respondió: ‘¿Entonces ya no tenemos que tomar el avión a Milwaukee?’”, contó entre risas.