La llegada de LaMarcus Aldridge a los San Antonio Spurs no ha sentado nada bien a los aficionados de los Portland Trail Blazers, que han visto como el mejor jugador del equipo se marchaba por la puerta de atrás dejando un vacío imposible de llenar a corto plazo. El nuevo jugador de los Spurs está convencido de que cuando regrese a Portland con su nueva camiseta las gradas no le van a recibir ni con un ápice del cariño que le han procesado durante todos estos años.
Aldridge confesó en la web de ESPN que no espera un recibimiento muy cariñoso cuando vuelva al Moda Center "Entendería la situación porque ellos no saben por qué me marché, por lo que al menos en el primer partido que juegue allí me van a abuchear"